Los 4 Ejercicios de psicomotricidad para niños y mejorar su lateralidad

Niño realizando ejercicios de psicomotricidad para mejorar la lateralidad y coordinación

La psicomotricidad es una disciplina que trabaja la relación entre el cuerpo y la mente a través del movimiento. Se enfoca principalmente en el desarrollo de las habilidades motoras, cognitivas.

En el caso de los niños, la psicomotricidad juega un papel fundamental en su desarrollo integral, ayudando a mejorar la coordinación, el equilibrio, la percepción espacial y la lateralidad.

La lateralidad humana se refiere a la preferencia que desarrollamos para utilizar un lado del cuerpo sobre el otro. Esto puede implicar la mano dominante, el pie o incluso el ojo predominante.

En muchos casos, los niños pueden presentar problemas de lateralidad, como una lateralidad cruzada (cuando, por ejemplo, escriben con la mano derecha, pero prefieren utilizar el pie izquierdo), lo que puede afectar su rendimiento escolar y motricidad.

Los ejercicios de psicomotricidad ayudan a corregir estos problemas, fortaleciendo la coordinación y la integración del cuerpo como un todo.

A continuación, presentamos 4 ejercicios de psicomotricidad para niños efectivos, que requieren poco material, y que están comprobados científicamente como beneficiosos para reforzar la lateralidad en niños de 7 a 12 años.

Estos ejercicios, además de ser valorados por expertos, cuentan con una excelente aceptación por parte de las familias que los han puesto en práctica.

1. Lanzamiento y Recepción con Una Mano Dominante

Objetivo: Fortalecer la lateralidad manual.

Materiales: Una pelota pequeña.

Descripción: Pide al niño que se coloque frente a una pared y lance la pelota con su mano dominante, intentando atraparla siempre con la misma mano. El objetivo es que realicen varios lanzamientos seguidos sin cambiar de mano. Tras varias repeticiones, se puede complicar la actividad alternando el lanzamiento y la recepción con la mano no dominante.

Beneficios: Este ejercicio trabaja la coordinación ojo-mano y ayuda a reforzar la dominancia de una mano sobre la otra, siendo muy útil para los niños que presentan ambigüedad en su lateralidad manual.

2. Saltos Alternos en Escalera

Objetivo: Desarrollar la lateralidad de pies y el equilibrio.

Materiales: Tiza para dibujar en el suelo o cinta adhesiva.

Descripción: Dibuja o marca una escalera en el suelo, dividiendo los espacios en segmentos largos y estrechos. Los niños deben saltar en un pie por cada segmento de la escalera, alternando el pie dominante con el no dominante a medida que avanzan.

Variantes: Para hacerlo más desafiante, pueden saltar hacia adelante, hacia atrás o incluso de manera lateral.

Beneficios: Los saltos ayudan a desarrollar la coordinación entre ambos lados del cuerpo y la habilidad de cambiar el peso corporal de un lado a otro, lo que refuerza la lateralidad y la conciencia corporal.

3. Cruzar la Línea Media con Tacto y Movimiento

Objetivo: Trabajar la coordinación entre los dos hemisferios del cerebro.

Materiales: Ninguno.

Descripción: Sentados o de pie, los niños deben tocar con la mano derecha diferentes partes del cuerpo del lado izquierdo (hombro izquierdo, rodilla izquierda, pie izquierdo) y viceversa. También se pueden utilizar comandos más complicados, como tocar la oreja derecha con la mano izquierda mientras se levanta el pie derecho.

Beneficios: Este tipo de ejercicios es muy efectivo para mejorar la integración hemisférica del cerebro, fundamental en el desarrollo de la lateralidad cruzada.

Los 4 Ejercicios de psicomotricidad para niños y mejorar su lateralidad

4. Juegos de Espejo

Objetivo: Desarrollar la conciencia espacial y la lateralidad global.

Materiales: Ninguno.

Descripción: Este ejercicio se realiza en parejas. Un niño realiza movimientos sencillos o más complejos (pierna y mano contraria simultáneamente) mientras el otro niño, debe imitar exactamente los mismos movimientos que realiza, es decir, si el primero levanta la mano derecha, el que imita deberá levantar la derecha también. El juego se llama espejo, pero realmente no es como el espejo. Se levantan las mismas manos y piernas que el que lo realiza (derecha o izquierda). Para niños con problemas de lateralidad resulta muy eficaz.

Beneficios: Los juegos de este tipo no solo son divertidos, sino que permiten a los niños entender mejor la relación entre las partes de su cuerpo y cómo cada lado trabaja en coordinación con el otro.

Los ejercicios de psicomotricidad para niños no solo favorecen el desarrollo motor y cognitivo, sino que son fundamentales para corregir problemas de lateralidad.

Estas actividades, diseñadas para ser simples y con poco material, han demostrado tener un gran impacto en la integración de los movimientos corporales y en la dominancia de uno de los lados del cuerpo.

Al practicar estos ejercicios, los niños no solo mejoran su coordinación y habilidades motoras, sino que ganan confianza en sus capacidades, lo que repercute positivamente en su desempeño diario y escolar.

En algunos casos, cuando los problemas de lateralidad persisten o afectan otras áreas del desarrollo, puede ser útil contar con una orientación más específica.

Si te interesa profundizar en este tipo de acompañamiento, te recomiendo leer más sobre las opciones de terapia para niños y adolescentes, donde se abordan de manera integral las dificultades relacionadas con la lateralidad y otros aspectos del desarrollo infantil.

Luis Elías Llorens

Luis Elías Llorens Director y fundador de Centro Llorens. Licenciado en Psicología y especializado en Lateralidad. Número de Colegiado: 22891.

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