Test de lateralidad
¿Qué es el test de lateralidad? Evaluaremos cada persona para determinar problemas de lateralidad en niños o adultos.
Un diagnóstico fiable requiere un test de lateralidad completo
El test de lateralidad es el que permite evaluar con certeza si una persona tiene realmente problemas de lateralidad a causa de una lateralización heterogénea o de una lateralización homogénea (diestra o zurda) insuficientemente afianzada. Es decir, aunque hay síntomas e indicios que pueden ser indicativos de un problema de lateralidad (escribir con una mano y patear la pelota con la otra, por ejemplo), la única manera de llevar a cabo un diagnóstico fiable es realizar este test.
Asimismo, es importante saber que, actualmente, existen diferentes test de lateralidad, pero que no todos incluyen todas las pruebas diagnósticas necesarias para obtener una evaluación objetiva y completa de la lateralidad del paciente; evaluación que debe incluir las pruebas para determinar los porcentajes de las cuatro dominancias a evaluar: la manual, la podal, la visual y la auditiva.
En nuestro centro, el test de lateralidad que realizamos a los pacientes se compone de tres pruebas específicas de lateralidad, además de un test cognitivo y otro emocional.
Las tres pruebas que componen el test de lateralidad
La razón por la que llevamos a cabo un test de lateralidad tan completo es poder evaluar en su totalidad y con precisión cuántos cruces de lateralidad presenta el paciente, así como el grado de lateralización heterogénea. «Estas tres pruebas de lateralidad nos permiten llevar a cabo una buena evaluación diagnóstica: detectar cuáles son las dificultades específicas de lateralización (si las hay), saber cuáles son los cruces de lateralización y su grado, así como detectar si hay un escaso afianzamiento de la lateralidad, ya que se puede dar el caso de que no haya un cruce de lateralidad, pero que esta no esté consolidada de manera homogénea como diestra o zurda», explica el fundador del centro, el psicólogo Luis Elías Llorens.
Primero se realiza un test inicial. Este test es la prueba principal y la más exhaustiva, la cual se complementa con un test neuropsicológico para determinar el porcentaje de dominancia auditiva y con un tercer test de visión que evalúa la dominancia visual.
El test principal incluye las pruebas más significativas para medir de manera general la dominancia auditiva, la dominancia visual y la dominancia podal, centrándose en más profundidad en la dominancia manual, lo cual nos permite obtener el grado de esta última. Completamos este test con el Test de Lateralidad Neuropsicológico para obtener también los porcentajes precisos de las tres primeras dominancias citadas, ya que este segundo test consta de una serie de ejercicios más específicos para las áreas podal, visual y auditiva. El tercer test es una prueba complementaria para profundizar en el área visual (dominancia ocular).
En resumen, son los resultados de estas tres pruebas de lateralidad los que nos proporcionan las información necesaria para extraer los porcentajes totales (sobre 100) de cada dominancia. De este modo, podemos detectar qué grado de homogeneización hacia el mismo lado hay entre las diferentes áreas (manual, podal, visual y auditiva). También podemos observar si el proceso de lateralización está afianzado o no en su conjunto (proceso de lateralización) y en cada área en concreto de manera individual, además de detectar los posibles cruces.
Ejercicios que incluye el test completo
El test de lateralidad completo (indoloro) consta de más de 50 ejercicios que se realizan en una hora, aproximadamente: 15-20 ejercicios sobre dominancia manual (se incluyen varios ejercicios de escritura simultánea para comprobar si hay escritura en espejo, y de puntillado), ejercicios para observar la dominancia visual, auditiva y podal (los cuales se complementan con 10 ejercicios específicos para cada dominancia, 30 en total), y seis ejercicios más exhaustivos sobre la dominancia visual.
Con la información personalizada sobre cada una de las dominancias del paciente y su combinación (porcentaje y afianzamiento) podemos determinar:
- Si la lateralidad es homogénea (si la predominancia es diestra o zurda).
- Si la lateralidad está mal afirmada (el paciente ya tiene un lado dominante en todas las áreas, pero en alguna de ellas no está plenamente establecida. Por ejemplo, en los ejercicios de dominancia visual, un paciente puede hacer siete de ellos con la derecha y tres con la izquierda).
- La lateralidad cruzada (el paciente tiene afianzada, o mayormente afianzada, la dominancia en muchas áreas, pero una de ellas es diferente al resto. Un ejemplo sería cuando la mano y el ojo dominante no están en el mismo lado del cuerpo).
Algunas personas también pueden presentar dominancia mixta o incompleta: cuando la dominancia prevalente de un lado sobre otro no es constante. Asimismo, esta predominancia mixta o incompleta puede ser, a su vez, cruzada y estar mal afirmada. Esto significa que además de tener un cruce de lateralidad, esta no está afianzada en los otros grupos o áreas.
Todas estas combinaciones son las que permite detectar el test completo de lateralidad cuando analizamos los resultados de cada una de las pruebas.
Los resultados del test se entregan en el plazo de diez días.
Una terapia personalizada
En función de los resultados del test de cada persona, que son diferentes en cada paciente, diseñamos una terapia psicomotriz personalizada (de lateralización y motricidad) que incluye, de manera troncal, diversos programas. Entre ellos:
- Programa de motricidad y desarrollo lateral
- Programa de desarrollo o lateralización visual
- Programa de desarrollo auditivo
- Programa de desarrollo motriz
- Programa de desarrollo espaciotemporal
- Programa de motricidad fina
Por ejemplo, si todas las áreas del paciente son diestras, salvo la lateralidad del ojo que está cruzada a la izquierda, la terapia se orientará a ejercicios para homogeneizar la lateralidad visual a la derecha y para reforzar de manera general la lateralidad diestra podal, manual y auditiva.
Además, la terapia de lateralidad se complementa con trabajo de habilidades cognitivas y con psicoterapia (un 15 % del tiempo de cada sesión, aproximadamente) para ayudar al paciente a gestionar todos aquellos problemas emocionales que surgen en su vida derivados de sus problemas de lateralidad: ansiedad, estrés, problemas de comunicación y relación, baja autoestima, etc.